Panameños ejercen presiòn al gobierno por salario mínimo
A pocos días de finalizar el año 2019 , las diferencias de opiniones entre empresarios y trabajadores en Panamá por el aumento del salario mínimo crece en medio de un aumento del costo de la vida y pronósticos caóticos.
Entre las consideraciones de la Cámara de Comercio, Industrias y Agricultura de Colón (COMCAM), ante el posible aumento del salario mínimo, es de «cautela», así lo explica , José Ortega Hidalgo, presidente de los comerciantes en la costa atlántica.
Según el criterio del presidente de COMCAM, actualmente no se está en las mejores condiciones, para cualquier ajuste salarial.
En tanto que en un pronunciamiento oficial, el Consejo Nacional de la Empresa Privada (Conep) rechazó un aumento salarial ‘en tiempos de recesión económica’, pues el ajuste tendría repercusiones negativas en la generación de empleos y el futuro de las empresas, ‘si la decisión no se maneja de forma equilibrada y balanceada’.
Según Julio De La Lastra, presidente del Conep, por cada uno por ciento de incremento, el gasto adicional anual en planilla que las compañías deberán afrontar es de 30 millones de dólares, en particular las pequeñas y medianas empresas, las cuales reportan menores ingresos y constituyen el 90 por ciento del tejido empresarial del país.
‘Históricamente la generación de empleo se ha visto afectada en los periodos inmediatamente posteriores a un alza del salario mínimo. Así lo reflejan los datos de 2010, 2012, 2014 y 2016’, sustentó De La Lastra, quien recordó que actualmente el desempleo es de 7,1 por ciento y la informalidad (44,9 por ciento) alcanza niveles nunca antes vistos.
Por su parte, Eduardo Gil, representante del Consejo Nacional de Trabajadores Organizados, manifestó que estas declaraciones no tienen sustento, pues los datos estadísticos que recogieron de los estados financieros de las instituciones arrojan números contrarios a los presentados en el debate de la Comisión de Salario Mínimo.
‘Es falso y totalmente irresponsable que los empresarios señalen que el aumento del salario traerá consigo el incremento del desempleo. Hay datos que afirman que esa situación no ha pasado durante los pasados aumentos’, subrayó.
Precisó que en esos años, Panamá redujo su tasa de desempleo por debajo del cuatro por ciento, lo que significa que hubo pleno empleo.
Gil adelantó que si el país no ajusta el salario acorde con las necesidades de la población trabajadora, entonces sí habría un incremento del desempleo, pues al demandar menos productos y servicios se generaría una desaceleración de la economía y por ende el cierre de empresas y despidos.
Ante la falta de consensos, el Conep propuso a la Comisión Nacional de Salario Mínimo, integrada por trabajadores, empresarios y Gobierno, monitorear el comportamiento de la economía y el mercado laboral al menos por un año antes de tomar una decisión final.
Por lo pronto, la última palabra está ahora en manos del Ejecutivo, el cual deberá fijar el salario mínimo para los próximos dos años antes de que finalice el 2019, el cual actualmente es de 624 dólares.