Por José Blandón Figueroa*

Ante la inminencia de un debate nacional en torno al futuro de la Caja del Seguro Social, quiero compartirles las siguientes: reflexiones:

1. Mis opiniones sobre lo que debe hacerse en materia de Seguridad Social se fundamentan, en gran medida, en lo vivido y aprendido durante el Diálogo Nacional por la Seguridad Social (Administración Moscoso) y en los debates en la Asamblea Nacional de la reforma paramétrica presentada por la Administración Torrijos. A mi juicio, el informe redactado en aquel entonces (2005) por el consultor Carmelo Meza Lago, debe ser de obligatoria lectura aún en la actual coyuntura.

2. Antes que pretendan cuestionar mi opinión con las clásicas descalificaciones, dejo claro que considero que tanto la Administración Martinelli como la Administración Varela manejaron de manera muy irresponsable el tema del Programa de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM) de la CSS. Allí sí coincido que fueron 10 años perdidos, en los que se pudo tomar decisiones y no se hizo. No lo digo ahora, lo dije entonces en varias ocasiones, incluido artículos en prensa escrita y entrevistas.

3.  Considero que no podemos restringir la discusión a la Caja del Seguro Social, sino que debemos ampliar el marco para debatir sobre el presente y futuro de la Seguridad Social en nuestro país. ¿Por qué digo esto? Mientras sigamos teniendo un modelo de desarrollo que continúa generando tanta informalidad, seguiremos teniendo un país donde un importante porcentaje de la población no cotiza a la CSS o no cotiza lo suficiente como para tener derecho a recibir una jubilación. Uno de los problemas a resolver es cómo logramos que más personas reciban una jubilación al llegar a la edad fijada para ello. Es un tema que no puede quedarse fuera del debate.

4. Es importante hacer mucha docencia sobre la Caja del Seguro Social. Hay muchas personas opinando y proponiendo «soluciones», desde la ignorancia más absoluta en aspectos básicos del sistema. Por ejemplo, la Caja se maneja con programas separados que no se afectan entre sí. Es decir, el Programa de Prestaciones Médicas recibe y administra su propio presupuesto y se encuentra en supéravit; mientras que es el Programa de IVM el cual confronta problemas financieros. Eliminar beneficiarios o hacer que estos paguen, como plantean algunos, ahorrará recursos para el Programa de Prestaciones, pero no para el de IVM.

5. Desde que en el 2006 se creó un sistema híbrido, en el cual los cotizantes más jóvenes están en un sistema de cuentas individuales para su jubilación, quedaba claro que quienes continuamos cotizando dentro del sistema solidario tendríamos problemas serios más temprano que tarde. Este sistema solidario se basa en una especie de pirámide, en la que las jubilaciones de los ya jubilados la estamos pagando quienes hoy cotizamos. Pero si es así, cuando mi generación ya esté jubilada (en unos 10 años), los más jóvenes ya no estarán aportando a nuestra jubilación, sino que estarán cotizando a SUS respectivas cuentas individuales. En otras palabras, desde el 2006, se sabía que las jubilaciones del sistema solidario se habían quedado descapitalizadas al mediano/largo plazo y que había que buscar la forma de «fondear» las mismas. La pregunta no era si llegaríamos a quedarnos sin plata para pagar esas jubilaciones, si no ¿cuándo sería el momento que nos comeríamos las reservas? Según el actual Director, ese momento ya empezó.

6. Pero ojo, no es que quienes están en el sistema de cuentas individuales no tienen problemas. Tendrán una jubilación, pero seguramente en condiciones mucho más desfavorables que para quienes están en el sistema solidario. Sólo recibirán lo que aportaron y ni un real más. En la medida que aumente la expectativa de vida sin cambiar la edad de jubilación, crecerá la posibilidad de que no reciban una jubilación hasta el final de sus días o que lo que reciban sea literalmente una miseria.

6. Con todo lo anterior en mente, la Caja del Seguro Social debe pasar por profundas reformas, que saquen la política de la institución. Una de la cosas que, como panameñista, más le reprocho al Presidente Varela es que permitió que la Caja del Seguro Social fuera parte de la negociación de votos en la Asamblea, facilitando que diputados del PRD tomaran prácticamente control de la misma. Esa visión de la Caja como botín político, como espacio sin fin para llenarlo de copartidarios ha drenado los recursos de la institución.

Debe haber la voluntad política para enfrentar poderosos intereses y lograr metas necesarias como despolitizar a la Caja, reformar la Junta Directiva, reasignar poderes para que el Director pueda hacer el trabajo que le corresponde y mucho más que es necesario hacer sin mayor dilación.

7. No podemos hablar de subir la edad de jubilación sin antes hacer más eficiente y transparente el manejo de fondos en los distintos programas de la institución. Ha existido mucha desidia y hasta corrupción en la administración de los activos de la Caja del Seguro Social. Eso sin hablar de la corrupción o irresponsabilidad de muchos patronos que no cumplen sus obligaciones para con la CSS.

8.En la discusión, es necesario entender que deben considerarse temas tan importantes como revertir la tendencia a la informalidad en nuestra economía, la necesidad de solidaridad y más transparencia en el sistema, la conveniencia o no de continuar con el sistema de cuentas individuales y la posibilidad real de no considerar dentro de las reformas algún tipo de medidas paramétricas. No podemos rehuir la discusión de temas controvertidos y escabrosos.

9. Como Partido Panameñista, participaremos de cualquier mesa de diálogo que se convoque para debatir el futuro de la Seguridad social y de la CSS en Panamá. Al fin y al cabo, la Caja es la joya de la corona de las obras legadas al país por nuestro fundador, el Dr Arnulfo Arias Madrid. Nos sentaremos a proponer, pensando en función de país, como siempre debe ser. No hay solución fácil ni existe manera de hacer lo que se necesita hacer y quedar bien con todos. Es en este tema, más que en ningún otro, en dónde se verá quiénes tienen madera de Estadistas para actuar pensando «en las futuras generaciones y no en las próximas elecciones» (no recuerdo quien dijo esta frase, pero no es mía, hago la salvedad; y por ello, las comillas).

El asunto es de tal importancia que debes procurar documentarte más al respecto (aunque el tema de tu jubilación te pueda parecer un tema lejano y abstracto) y exigir a todos los y las dirigentes del país (o aspirantes a serlo) que se pronuncien con claridad y den su opinión al respecto, sin demagogias.

Lo dejo hasta aquí.

*Saludos, José Blandón Figueroa, ciudadano y asegurado, Presidente del Partido Panameñista

Panamá, 16 de enero del 2020