Con la aprobación, en primer debate, del Proyecto de Ley 251, se otorga una extensión de la amnistía tributaria hasta el 30 de junio a fin de que los contribuyentes cumplan con su obligación en el pago de recargos, intereses y multas morosas.

La Comisión de Economía y Finanzas dio primer debate a la iniciativa del diputado del Partido Revolucionario Democrático (PRD) Melchor Herrera.  La propuesta de amnistía introduce modificaciones a los artículos cinco, siete y ocho de la Ley 99 de octubre de 2019, que otorgaba una amnistía en el pago de los tributos administrados por la Dirección General de Ingresos.

Dicha amnistía a la que se refiere esta Ley finalizó el pasado 29 de febrero y mediante el Proyecto 251 se aprueba una extensión.

La normativa   modifica el numeral cinco del artículo 5 de manera que los pagos que se realicen entre el 29 de febrero   hasta el 30 de junio del mismo año se condonen hasta un 85% de la totalidad de los intereses, recargos y multas.

También modifica el numeral cinco del artículo siete especificando que el plazo para el cumplimiento total de los arreglos de pago que ya se habían realizado antes del 29 de febrero, tendrán que pagarse con el beneficio fiscal hasta el 30 de junio.

En tanto, los arreglos de pagos que se formalicen posterior al 29 de febrero, los contribuyentes tendrán hasta el 30 de septiembre para pagar con los beneficios que otorga este proyecto de extensión de amnistía.

Publio De Gracia, director general de la Dirección General de Ingresos (DGI) resaltó los beneficios de esta modificación de la Ley señalando que se podrían recaudar cerca de 70 millones de dólares adicionales.

Con la amnistía que finalizó el 29 de febrero, la DGI recaudó, aproximadamente, cerca de 140 millones de dólares, diez millones menos de lo programado y según De Gracia no se alcanzó la meta debido a ciertos  aspectos técnicos y jurídicos.