Un pueblo sumergido
Redacción / Al Día Panamá
La columna de cemento que sobre en la superficie del lago de Resia es el campanario de una iglesia del siglo XIV. Se encuentra en el Tirol italiano, en la provincia de Bolzano-Bozen, y era la construcción más emblemática de Graun, un pueblo que lleva más de medio siglo sumergido.
Los historiadores explican que quedó sepultado bajo el agua porque en 1940 las autoridades regionales aprobaron la construcción de una presa hidroeléctrica y Graun estaba justo en medio del futuro embalse.
El pueblo tenía 163 casas en las que vivían más de 500 personas. Y aunque la población se opuso al proyecto, no consiguió pararlo, así que diez años más tarde sus habitantes fueron trasladados a otro lugar.
La plataforma especializada en informaciones turísticas de Bing nos explica que hoy en día, el lago de Resia es un valioso recurso energético, pero también un destino turístico donde en verano llegan turistas y aquellos jóvenes amantes de los
deportes acuáticos y en invierno, los patinadores, ya que la superficie del lago se congela.