Houston / Agencias

Siguen golpeando los Rockets de Houston, pero en ocasiones las acciones en el camino dependen demasiado de un hombre y aún así siguen batallando. Todos comprenden el escenario de las criticas, es aceptable, ya que con frecuencia ha sido el elenco de apoyo que se queda frío en los grandes momentos.

Faltan tres juegos en la burbuja, sin embargo, hay signos de que esto podría estar cambiando para en la ciudad.

Cuando Daryl Morey recogió a Jeff Green en la mitad de la temporada, fue un movimiento de bajo riesgo y alta recompensa. Green había aparecido en solo 30 juegos con los Utah Jazz antes de ser eliminado. Los Rockets vieron valor en lo que podía aportar al equipo, sin embargo, dada su versatilidad y tamaño.

Hasta ahora, el experimento no podría haber funcionado mucho mejor para ambas partes. El jugador de 33 años está disparando el 41.8 por ciento más alto de su carrera desde más allá del arco, donde los Rockets se ganan la vida.