Washington/ Agencias

Ya los Estados Unidos ha superado los 11 millones de casos confirmados de COVID-19, menos de una semana después de haber alcanzado el hito de los 10 millones de casos.

Se confirma que por el momento hay un número récord de hospitalizaciones por coronavirus en el país, con 70.000 personas internadas.

Debido a que el número creciente de casos está afectando a toda la nación, Michael Osterholm, uno de los principales asesores del equipo de respuesta al coronavirus del presidente electo Joe Biden, en medios locales y Democracy Now,  dijo que Estados Unidos está presenciando “muchas miniepidemias”.

Los estados están implementando nuevas medidas para combatir el aumento: Wisconsin y Chicago han emitido nuevas órdenes de quedarse en casa, mientras que Vermont ha prohibido todas las reuniones de personas que no vivan en el mismo hogar.

El estado de Washington también ha establecido reglas estrictas para restringir las reuniones con personas que no sean integrantes del mismo hogar, limitar la capacidad de los restaurantes y prohibir las actividades en los interiores de gimnasios, museos y cines.

Utah y Dakota del Norte han sido los últimos estados en exigir el uso obligatorio de mascarilla. Asimismo, en el estado de Dakota del Sur, que tiene una de las peores tasas de mortalidad por COVID-19 del mundo, la gobernadora Kristi Noem, una aliada cercana del presidente Trump, ha dicho que no exigiría el uso obligatorio de mascarilla, incluso si la orden viniera del futuro presidente Joe Biden.