La minería en Panamá
Pastor Durán Espino / Educador
Existen muchos panameños preocupados por el asunto de la minería, pues en un diario local se ha dicho que la empresa “Minera Panamá” extrajo en su concesión en Donoso (provincia de Colón) 1,455 millones de dólares en minerales. También se ha dicho que lo que no se destacó allí es que a Panamá solo le tocan 29.1 millones de esa fortuna.
Esto no nos extraña porque no es una cosa de ahora sino que siempre se ha dicho que la explotación de minerales metálicos en nuestro pobre país responde a la política oficial del llamado “ajuste estructural” y de la “transnacionalización de la economía” que desde hace tiempos se realiza bajo la filosofía del llamado “neoliberalismo”. Según esta filosofía del neoliberalismo lo que importa es la “generación de riqueza” sin importar a dónde va a parar esa riqueza ni qué impacto va a tener sobre la población humana y sobre la naturaleza.
Ahora que tocamos este tema, recordando al desaparecido sacerdote Héctor Gallego, que este asunto ha sido reconocido entre otras personalidades de nuestro mundo Cristiano y nacional, en su tiempo por el obispo de Veraguas, Monseñor Oscar Brown, según lo dió a conocer a miembros del Frente Nacional de Lucha por la Vida y Contra la Minería (FRENALVCOMI), en una reunión sostenida en Santiago de Veraguas el 10 de febrero de 1998.
Fue tan consciente el Obispo Brown de tal situación, que entre otras cosas dijo en aquella reunión a los delegados del FRENALVCOMI: “Cuenten con el apoyo de la Iglesia, ella está al lado de los más necesitados” y : también dijo: “no somos enemigos del progreso ni del desarrollo que tiene como centro al ser humano”. Por su parte, el Obispo de Azuero en aquel entonces, Monseñor José Luis Lacunza, en carta enviada el 15 de julio de 1997 al Ministro de Comercio e Industrias, Raúl Arango G., con relación al proyecto minero de Cerro Quema (provincia de Los Santos), citó el caso de la Mina Santa Rosa de Cañazas de Veraguas y dijo lo siguiente: “La experiencia de la Mina Santa Rosa de Cañazas no deja buen sabor de boca en quienes conocen de cerca el proyecto” (SIC.).
Recordando aquellos tiempos, nosotros sabíamos que según fuentes extraoficiales se estaban dando masivos despidos en la mina Santa Rosa, que regentaban la canadiense “Greenstone Resources” y la estadounidense “Brown and Root”. Según dichas fuentes existía disconformidad con las liquidaciones de los obreros cesanteados. Por su parte, el Frente Nacional de Lucha por la Vida y Contra la Minería (FRENALCOVMI), ofrecía ayuda legal a los mencionados obreros, si así lo solicitaban, a través de los activistas del Frente Veragüense.