PARÍS, 27 dic (Reuters) – El primer ministro francés, Jean Castex, dijo que en respuesta a una rápida propagación de la variante Omicron de COVID-19, el gobierno está reduciendo la demora para una tercera inyección de refuerzo a tres meses desde cuatro, pero habrá No habrá toque de queda para la víspera de Año Nuevo.

Castex también dijo que a partir de este lunes y durante las próximas tres semanas, todas las reuniones públicas estarán limitadas a 2.000 personas para eventos bajo techo y a 5000 personas para eventos al aire libre.

Se prohibirá el consumo de bebidas y alimentos en el transporte de larga distancia, así como en los cines, y el trabajo a domicilio será obligatorio durante al menos tres días a la semana cuando sea posible, dijo Castex.

El gobierno también ha decidido hacer que las máscaras faciales sean obligatorias al aire libre en el centro de las ciudades, bajo la autoridad de los representantes del gobierno local.

Castex dijo que la aprobación de la vacuna planificada por el gobierno, que requerirá prueba de vacunación, no solo una prueba negativa, entrará en vigencia a partir del 15 de enero, si el parlamento aprueba un proyecto de ley del gobierno.

A diferencia de otros países que han retrasado el regreso de los alumnos a la escuela, las escuelas francesas reabrirán como estaba previsto el 3 de enero, dijo Castex.

Castex dijo que la tasa de incidencia de Covid, el número de infecciones por cada 100.000 personas por semana, ahora supera las 700 y se encuentra en un nivel récord desde el inicio de la epidemia.