El Escorpión
PESCANDO EN RÍO REVUELTO
Ahora le tocó el turno a Santa Ana y El Chorrillo con los desórdenes provocados por la maleantería. Disparos con armas de fuego, agresiones con piedras e intentos de vandalismo estuvieron a la orden del día. Es doloroso ver cómo un reclamo popular puede quedar en manos de gente que no tiene oficio ni beneficio, a no ser el de aprovechar la ocasión para la satisfacción de sus propios y mezquinos fines. Retomemos el rumbo antes de que estas actitudes se conviertan en pan de cada día cada vez que haya protestas.
QUEREMOS PAZ Y LIBERTAD
Productores, empresarios pequeños y grandes, asociaciones y gremios profesionales están clamando por un clima de paz en nuestro país. Múltiples son las voces que piden un freno a la corrupción, transparencia en el manejo de la cosa pública, austeridad fiscal, y un mayor desarrollo del sector productivo. Los primeros responsables en escuchar ese clamor son los políticos del ejecutivo y de la asamblea, para recuperar la credibilidad y la confianza ciudadana. Toda práctica corrupta debe investigarse y castigarse, todo cierre forzoso de carreteras y calles debe cesar, y todo paternalismo debe acabarse. Si realmente queremos paz y libertad, entonces empecemos por enmendar los errores que constituyen los pecados capitales de nuestra clase dirigente, sea esta política, empresarial, gremial o popular. Nadie está exento de esta realidad.
DICEN QUE YA NO SE VA
A través del vocero Ducruet se ha informado que el presidente de la república ya no está pensando ir a la toma de posición del presidente electo de Colombia Gustavo Petro, a pesar de haber confirmado su asistencia. Esperemos que el mentado viaje sea cancelado oficialmente, porque la situación del país no está para viajes presidenciales fuera del suelo patrio. Estaremos vigilantes.
¿QUÉ NO ENTIENDEN TODAVÍA?
El docente veragüense que insiste en que el diálogo se dé en Santiago y que bloquean el paso en la Panamericana porque así luchan por el pueblo, preguntaba en un video qué no entienden todavía, refiriéndose a sus acciones de huelga, paro y obstrucción del libre tránsito. Pero también otras voces le recuerdan a él, principalmente la de los productores, que el docente de marras debe entender que sus acciones perjudican al trabajador del campo, a los enfermos que pierden sus citas, a los alumnos que no están recibiendo clase, y a las madres que hacen mil actos de magia para encontrar qué alimentos cocinar y con qué gas hacerlo. Piénselo profe: lo que usted defiende y fomenta ya pasó a ser un acto criminal, tanto en lo ético como en lo práctico. Súmese al diálogo de la mesa única y libere las vías. Con eso gana más.