• Las 5 Esquinas de NY TV Show , desde la gran Manzana para el mundo

Por Roman E Polanco / Al Día Panamá

Un día fresco, puedo decir hasta atrevido, espontaneo para sabotear el futuro y ponerlo para usted, mover las fichas con imaginación y destreza. Dentro de ese amarre con la distancia  hacer tu presente mejor.

Los sentimientos bien paridos refrescan la imaginación. Las emociones bien controladas maduran tu actuación. Nunca te dejes seducir por las emociones ni el sentimentalismo propio de personas débiles. Que la fortaleza de tu imaginación coincida con tus proyectos y propuestas inmediatas.  Escoge dentro del Megamercado de las ideas todo lo que sea beneficioso en común. El absurdo, dentro del Megamercado, posee su propio crédito personal, malicioso, malvado, estresante y proporcional.

En la guerra lo absurdo obtiene ventajas inesperadas a la vista. Un buen pensador recoge todo lo absurdo y sus proporciones para sacar ventajas. La guerra es el símbolo del mal, pero se modifican actitudes cuando lo absurdo da resultados sorprendentes.  “Crisis en Europa”, donde el absurdo hace su propio recorrido triunfal.  Agilidad mental para cosechar de los errores. Cuando tienes y puedes mostrar tus músculos, la estupidez te atrapa, esta en ti el desafío.

El beneficio de la tristeza y la tragedia se podría compensar con ayuda superior a los daños y una experiencia reveladora. Dentro de lo absurdo debemos entender que hay que valorar riesgos con aprendizaje propio valedero, formando un laboratorio para tu propia evolución. Con el beneficio de lo absurdo aprenderemos a no necesitar bautismo ni vacunas para supervivencia. De esta forma podríamos decir que lo absurdo es delicioso, si lo trabajamos se convierte en un caldo de cultivo para una salud precisa. Usémoslo como cultura. Un atractivo corregidor de tu sistema gustativo cultural. Ya tenemos una imagen de marca: lo absurdo como sistema correctivo para sacar provecho a tus zonas erróneas.

Utilicemos el proceso de acometida técnico mecánico para luchar contra lo absurdo a favor. Ahora empieza tu libertad soberana para una vida mejor, sin ambigüedad de percepción. Yo aprecio cuando la conjetura, realidad y la imaginación se conjugan. He encontrado un espesor estimulador de las ideas y cosas evasivas que vienen a mi mente, entonces el sueño me da la libertad de hacer lo que quiero sin cargar la etiqueta de la vergüenza; un trabajo justo para orgullo colectivo.

*Roman Polanco es periodista y escritor en Nueva York.