Qatar / Agencias y Reuter

continuará quedando por muchos tiempos la primera sensación de la Copa del Mundo de 2022,  fue la victoria de Arabia Saudita sobre Argentina (2-1) el martes 22 de noviembre. La albiceleste comenzó el partido marcando un gol, penalti de Mesi, en el estadio Lusail, pero una estruendosa remontada de los sauditas al principio de la segunda parte les arrebató todo.

Los argentinos, que se presentaban como favoritos para este Mundial, se arrodillaron desde el principio nos plantea el recien informe de Nicolas Bamba

? "Por algo pasan estas cosas"
? "Depende de nosotros"
? "Tenemos que volver a las bases"
? "Terminé bien físicamente. Mi tobillo está bien"

? Lionel Messi en zona mixta pic.twitter.com/2Y7g5IWCSb

— C5N (@C5N) November 22, 2022

Argentina será recordada como el primer gigante del fútbol mundial que mordió el polvo en este Mundial de Catar. Mientras que Inglaterra y Holanda no fallaron en su debut el lunes, el equipo sudamericano cayó estrepitosamente el martes en el Grupo C contra Arabia Saudita en el estadio Lusail.

Lautaro Martínez pensó que podría hacer un doble break, pero el primer gol fue anulado por fuera de juego por el asistente de vídeo. El árbitro no necesitó la tecnología para ver que el delantero estaba de nuevo fuera de juego en el segundo. En el descanso, Argentina ganaba 1-0 tras unos primeros 45 minutos bastante cerrados.

Al Dawsari con esplendido golazo 

Todavía no se sabe lo que Hervé Renard, el entrenador francés a cargo de los Halcones, dijo a sus jugadores. Pero cuando los sauditas volvieron al campo para la segunda parte, anularon a los gigantes argentinos. Saleh Al Shehri, bien colocado en el área ante Cristian Romero, superó al defensa con facilidad antes de disparar con la zurda para superar a Emiliano Martínez (48′).

A continuación, Salem Al Dawsari puso por delante a Arabia Saudita con un espléndido gol por la escuadra (53′). El portero argentino no pudo hacer nada ante semejante joya. Scaloni hizo un triple cambio y Argentina se lanzó al ataque.

Pero fue inútil. Frente a los sauditas, que se encerraron en su propio campo y se aferraron al balón (seis tarjetas amarillas desde el minuto 67), los sudamericanos sufrieron para encontrar el camino. Fue un gran logro para Arabia Saudita, que se llevó la victoria frente a un equipo que era favorito, como Brasil. El próximo partido de la selección de Messi, contra México el 26 de noviembre, será crucial. Arabia Saudita se sitúa en cabeza del Grupo C a la espera del partido México-Polonia de este martes.