TRES LÍNEAS
FRACASOS ESCOLARES
El sistema educativo nacional reclama un cambio de rumbo que lo dirija hacia la modernización, la eficiencia y la excelencia académica. Los intentos por lograr esa renovación hasta el momento han sido en vano, por lo poco que se ha logrado en cuanto a superar los fracasos y la prevalencia en la tasa de deserción escolar. El único cambio notorio ha sido el aumento salarial a los docentes.
Asignaturas como matemáticas, ciencias, español e inglés marchan a la cabeza en cuanto a la reprobación de los estudiantes. Más de 100,000 alumnos a nivel nacional han reprobado una o dos materias y unos 67,000 obtuvieron entre 1.0 y 2.9 de promedio. ¡Desastre total!
Todo este asunto no puede continuar. Es preciso ponerle un alto y pronto. Hay que involucrar a la comunidad, a los padres de familia y los propios estudiantes, además de los educadores, porque el tema de la educación atañe a todos. Ya sabemos que podrán surgir las consabidas huelgas y paros, como suele ocurrir cuando se trata de transformar el sistema educativo, pero hay que tomar decisiones firmes y hacer el cambio. Lo que está en juego es el atraso o el progreso del país y el bienestar de la mayoría sobre la minoría. Y si no se logra por consenso, entonces, hay que hacerlo por imposición. Eso sería tener autoridad.
- ¿Por qué después de tantos años de intento no se logra transformar nuestro sistema educativo?
- ¿Qué fuerzas o razones impiden el cambio y provocan el fracaso y la deserción escolar?
- ¿Cuáles son las consecuencias y repercusiones actuales y futuras de mantenerse el actual sistema educativo?