El Escorpión
DIÁLOGO EN EXTINCIÓN
Aparentemente el diálogo penonomeño podría catalogarse como una especie en peligro de extinción, porque no hay visos de poder reanudarlo. Ese ejercicio nació con un pecado original, al excluir otros sectores de la sociedad afectados por decisiones que tomó la mesa y que declararon de «forzoso cumplimiento» para quienes entraran a participar en la segunda etapa. Lo único concreto que salió de dicho diálogo fue el subsidio temporal al combustible y un arroz con tuna que trajo más discordia que unión. El resto de los acuerdos quedaron con más pena que gloria. Ahora muchos se preguntan si las pérdidas y las divisiones sociales que dejó el cierre prolongado de las carreteras del país justifican este resultado. La mesa de diálogo nacional de Penonomé está en un estado de muerte clínica y poco falta para cantarle el requiem. Triste y dolorosa realidad.
PREOCUPACIÓN POR PUENTE
El Puente de las Américas estará sometido a partir del 26 de enero a un proceso de reparación, por los daños aparentes que presentan su estructura y su pavimento. En los últimos 20 años los gobiernos han invertido más de 100 millones de dólares en mantenimiento y otros trabajos, pero el puente siempre luce dañado. La superficie de rodadura es un tormento, las losas no se sabe a ciencia cierta en qué condición están, y la capa de pintura desaparece tan rápido que hasta el óxido parece el aspecto normal del puente. Esperamos que en esta oportunidad el trabajo se haga a conciencia, porque es mucho lo que está en juego en esa estructura que cruza el Canal. Pero, sobre todo, inspeccionar bien las vigas y reemplazar las que sea necesario, que hace unos años iban a ser cambiadas y las que se compraron dicen que fueron a parar a la finca de un ex presidente. ¡Ojo con eso!
FISCALÍA TRAS AVIVATOS
La Fiscalía de Cuentas irá tras aquellos que han contratado obras con el estado y no han cumplido con realizarlas. Un número plural de ellas ni siquiera iniciaron y al parecer cobraron parte del dinero. El asunto es como un mundo raro en el que algunos avivatos hacen su agosto con los recursos del estado y, para colmo, no les ocurre nada y vuelven por la revancha sin que hasta el momento alguien les ponga freno. Ahora falta que la fiscalía actúe contra estos «contratistas» y también se ponga las pilas con aquellos que entregan obras de mala calidad por utilizar materiales bajo estándar y embolsarse la diferencia en los precios entre que tienen los buenos materiales y los de baja calidad.
POR FIN LA NUEVA ESCUELA
Durante los próximos días iniciarán los trabajos de construcción del nuevo edificio de la Escuela República de Venezuela, que también albergará el instituto comercial Bolívar, obra que espera desde hace varios años que se concrete. El viejo edificio, que ahora dará paso a uno supuestamente moderno y funcional, fue el bastión de lucha magisterial contra la reforma educativa de 1979 y la lucha civilista de finales de los años 1980. No sabemos si el nuevo tendrá la mística del antiguo, pero esperamos que, al menos, cumpla con las expectativas para un proceso de enseñanza aprendizaje cónsono con los desafíos del siglo 21, tanto para los alumnos que se cobijen en su aulas como para los educadores que tienen la responsabilidad de impartir las lecciones que preparen a sus estudiantes para afrontar la vida como profesionales y ciudadanos ejemplares.