El Escorpión
FOSO DE ATAQUE
Quien estuvo feliz con el anunció de la llegada de la tuneladora que construirá el paso submarino bajo el Canal de Panamá para el paso del monorriel hacia el oeste fue el ministro Sabonge. Muy contento habló el hombre de las bondades de la máquina excavadora y dijo que al arribo de ésta, el llamado «foso de ataque» será el primero en abrirse. Cómo no iba a estar contento y feliz si el tamaño de ese hueco será como la madre de todas las hoquedades que jamás haya visto en su gestión. Aunque a decir verdad, el ministro huequero últimamente le ha metido empeño a los parches y curitas a algunas calles y carreteras en distintas áreas del país. Hasta pintura amarilla en la curva cercana al Rod Carew. Si sigue así hasta podríamos nombrar al túnel en su memoria. ¡Sabonge, Sabonge!
HABLANDO DEL CANAL
La recaudación por tonelaje de la vía acuática está a la baja, según anunció el administrador de la empresa canalera. No es algo que depende de la administración del Canal, sino una situación provocada por la economía mundial que afecta el transporte marítimo, sobre todo el de gran escala. Sin embargo, al haber más tránsito de buques pequeños y menos tonelaje, el uso de agua aumenta y con menor recaudación el Canal de Panamá vive «tiempos difíciles» como lo califica el administrador Ricaurte Vásquez. A ver si esta realidad le abre los ojos a los políticos y se dejan de estar usando los aportes del recurso canalero para echarlos en la caja común y gastárselos en planilla y otras sandeces del presupuesto de funcionamiento y la burocracia estatal. Esos fondos hay que invertirlos en el desarrollo del país, a través de un plan bien diseñado para el adelanto de la ciencia, la tecnología, la educación de avanzada, la investigación, la innovación y la construcción de estructuras estratégicas que aporten al crecimiento del PIB. Está demostrado: el Canal no es una fuente inagotable de ingresos para el estado.
EDIFICIOS ESCOLARES
El mantenimiento y la construcción de los planteles educativos deberían pasar a manos de los municipios, conjuntamente con las juntas comunales, para que haya una vigilancia permanente sobre ellos y un uso adecuado de esas instalaciones en tiempo de vacaciones escolares. Supuestamente hay una instancia para esto, a cargo del ministerio de educación, pero ha resultado inoperante. Están igual que la autoridad de aseo. El ministerio debe encargarse de la calidad de los contenidos y los edificios escolares de los municipios, regentados por patronatos surgidos de las comunidades. Panamá ha crecido a la par de sus necesidades y problemas; así mismo debe cambiar la forma de ejercer la administración pública y el uso y cuidado de los bienes públicos.
APARECIÓ EL FAISÁN
Uno de los 10 faisanes robados del zoológico de El Valle de Antón apareció por un poblado De Santiago de Veraguas conocido como Cañacillas. El hecho delictivo no es solo una transgresión a las leyes, sino un acto bajuno y de la peor calaña criminal, porque atenta contra una gestión que le da la oportunidad a miles de panameños de conocer la fauna de otros lares y aprender sobre ella. Incluso contra la vida misma de los animales, que requieren un cuidado especial que, difícilmente, podrán darle quienes adquieran dichas aves como mascotas. Ahora hay que hacer confesar a quienes lo compraron o lo adquirieron de la forma que sea, para dar con los autores intelectuales y materiales del deleznable delito. No puede pasarse por alto esta situación, porque eso sería alentar a otros a usufructuar de bienes malhabidos, ya sea robándolos o comprándolos o aceptándolos como regalo. Como decía Pacheco en uno de sus temas musicales: con el faisán no se meta nadie.