SEGUIRÁN PINCHADOS

La Sala Segunda de lo Penal rechazó de plano por improcedente las solicitudes de aclaración de sentencia presentadas por el cocobolo Pérez y por Garuz, lo que significa que tendrán que completar la sentencia de 50 meses por el delito de inviolabilidad del secreto y contra la intimidad dictado por el Tribunal Superior de liquidación de Causas Penales. El juicio conocido como Caso Pinchazos, declaró no culpable al jefe de ambos, pero mandó para la cárcel a estos dos por las escuchas ilegales y la desaparición de la máquina pinchadora. Ahora tendrán que seguir pinchados dentro de una celda, donde tendrán tiempo para pensar si todo lo que saben se lo cuentan al Tío Sam para pasarle factura al que los embarcó en la aventura de andar pinchando los teléfonos ajenos.

MATRAQUEO LEGISLATIVO

Los padrastros putativos de la patria se están tomando su tiempo para conformar las comisiones permanentes de trabajo. Todavía no hay fecha para la conformarlas y eso impide que se discutan y aprueben en primer debates los proyectos de ley. Con todos los cambios que han traído las elecciones internas de los partidos en sus colectivos y la influencia de sus diputados, el asunto obliga al matraqueo legislativo para poder repartirse los puestos. Dentro de todo esto también está demorado el reconocimiento de la fracción parlamentaria adepta a Drácula, que partió en dos el voto en bloque de los diputados rebeldes del CD. Veamos cómo acaba el cuento, sobre todo con un presidente de la asamblea totalmente anodino y el hijo de Robin y la Gatúbela moviendo los hilos por detrás.

PUENTES PARA LOS TIGRES

Por los lares del ministro huequero están contentos porque anunciaron la reparación del paso vehicular de San Miguelito, abandonado a su suerte desde hace años. Como ya estamos en vísperas del año electoral, ahora irán a marcha forzada para maquillar cuanto obra pública puedan. Pero esa «contentura» no la comparten los conductores, porque hay otros que con cada traqueteo les recuerda lo mal que andan estas estructuras. Tal es el caso del paso elevado que sirve para conectar la Cinta Costera por los lados del Mercado del Marisco. Solo hay que pasar por debajo para sentir que a uno se le viene encima el puente. Y si conduce por arriba, las juntas de metal están tan hundidas que no hay carro que puede pasar por encima de ellas sin estremecerse por la enorme zanja que se ha creado en ellas. Una de cal y mil de arenas para el huequero.

FERIA DE BOLETAS

Sigue la insensata práctica de multar indiscriminadamente a los vehículos «mal estacionados» en el Casco Viejo. ¿Qué autoridad moral tienen los que mandan cuando están dejando destruir las vías del sitio histórico, acaparan los edificios de estacionamiento construidos para el público y llenan de conos los puestos aledaños a sus oficinas para aparcar sus vehículos, pero multan al ciudadano común y corriente? Lo que deben hacer es desalojar los inmuebles destinados a estacionamientos públicos y permitir estacionar a un lado de la vía, al menos por dos horas, como se hace en otras ciudades del mundo. Primero las soluciones, después las multas. ¿Es eso difícil de comprender?