El Escorpión

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PROTESTA MINERA

La discusión en primer debate del contrato minero es un hervidero de pasiones. Voces de un lado y de otro rechazando o respaldando la explotación de cobre en Donoso. Entretanto, afuera del hemiciclo legislativo otros grupos deciden protestar en la manera acostumbrada tirando piedras y haciendo sentir con acciones de fuerza que no traen otra consecuencia que la respuesta de la policía, impidiendo con dichas acciones que otras personas protesten de manera pacífica. Así está la cosa. Pero lo más notorio es la cara dura de los diputados que dominan la mayoría de la comisión que trata el asunto en primer debate, porque saben muy bien que los argumentos y las protestas son parte de su teatro. Ellos van a aprobar el contrato y, quizá, ni siquiera tomen en cuenta el parecer de quienes advierten el peligro presente y futuro que trae consigo la explotación minera. De no atender el repudio popular, no quedará más que ponerlos en una lista y algún día investigarlos y llevarlos a juicio por sus actos antinacionales.

CANSANDO AL PERITO

El profeta Eliseo volvió a sentarse ante el tribunal para denunciar la conducta dolosa de algunos ex funcionarios y particulares en el Caso Blue Apple. Los defensores le han sometido a largas horas de interrogatorio y contra interrogatorio por largas horas. Seis la primera sesión y 12 o más en la segunda. Como en el juicio anterior, algunos pretenden doblegarlo por cansancio para provocar una falla de la cual agarrarse para «salvar» a sus defendidos. Algunas de esas maniobras fueron señaladas por la juez del caso al solicitarle a los abogados que se abstuvieran de seguir con ellas. La consigna parece ser sacar libre al cliente con tecnicismos y no con la demostración de su inocencia. Y mientras los vasallos enfrentan la justicia, los hijos del rey buscan refugio en prerrogativas parlamentarias y en la dilatación de su caso apelando a la Corte Suprema. Como que habrá Blue Apple para rato.

COSA DE NUNCA ACABAR

Por los lares del Seguro Social hay temas de nunca acabar. La escasez de insumos y reactivos es uno de ellos. Ahora se vienen con crear una comisión que investigue las denuncias de los usuarios, para ver si es cierto que existe tal escasez. Para tal asunto no es necesaria ninguna comisión, es cuestión de ir al lugar de los hechos y abrir los anaqueles para corroborar las quejas. Luego, ordenar una auditoría y determinar si se compraron o no, en qué han sido usados y si tomaron otro rumbo en las manos de quién sabe quién. Si quieren trabajar como Dios manda, eso sería lo mínimo que deben hacer. No me digan que no tienen anestesia y que el suero ya se uso para endulzar el café, ¡je, je!

DETERIORO INSTITUCIONAL

Si algún legado nos dejan los tres últimos gobiernos es el deterioro de las instituciones democráticas. La gestión de gobierno es un asco en cuanto a transparencia, administración fiscal e inversión pública. La burocracia no solo ha crecido, sino que la calidad de los funcionarios nombrados ha venido a menos porque vale más la influencia y el padrinazgo. Los fondos dedicados a los gobiernos locales son otorgados con base en la cercanía a la cúpula del ejecutivo que en las necesidades de la comunidad. Nos dejan una asamblea prostituida por aquellos que conforman la mayoría, no porque así lo haya querido el sufragante, sino por los arreglos de recámara y la venta de conciencias que llevan a traicionar hasta al propio partido. Y, sobre todo, un escándalo de corrupción tras otro y el enriquecimiento sin justificar por parte de algunos funcionarios y sus familiares o allegados. Tras casi 15 años de estas prácticas, el daño a la institucionalidad del país es inconmensurable y está a punto de provocar un estremecimiento de las estructuras del régimen democrático. Esperemos que sea para bien y libre de la violencia fratricida.

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