El Escorpión

 El Escorpión

CERCA LEGISLATIVA

El cerco que impone la asamblea cuando debate sobre temas sensitivos es una vergüenza para la sociedad democrática. Un órgano del estado que debe estar cercano al pueblo y, quizá, el primero en practicar esta cercanía, lo hemos visto convertido en una institución que contraria el sentir de las mayorías y el que más sentimientos de rechazo registra entre los ciudadanos. La desconfianza tiene sus raíces en la corrupción rampante de algunos de sus miembros, en la complacencia de los diputados adeptos al poder ejecutivo con el partido gobernante y en la ausencia de equilibrio y fiscalización que debe ejercer en la gestión de gobierno y el buen manejo de las finanzas públicas. Por eso necesitan la cerca que con cada vez más frecuencia se erige entre quienes se sientan en sus curules y el ciudadano de a pie que clama afuera por el cumplimiento de los deberes que le impone la constitución al órgano legislativo. Cada tramo de cerca es un estacón lleno de ignominia y un símbolo de la muerte lenta que le infligen a la democracia.

DESGREÑO FINANCIERO

Las finanzas públicas y su manejo han venido a menos en los tres últimos lustros. Desde el despilfarro hasta el uso dispendioso y el endeudamiento sin control han puesto la hacienda pública al borde de un estado crítico. Subsidios crecientes con claras intenciones populistas y electoreras, abultamiento de la planilla, enriquecimiento ilícito a través de contrataciones dudosas, peculados a tutiplén y falta de una mejor planificación en las inversiones públicas son prueba del desgreño financiero imperante. Los recursos del estado, aunque abundantes para un país con nuestra población, están muy lejos de ser inagotables. Necesitamos un gobierno capaz de administrarlos con rigor y eficiencia, cosa que en los últimos 15 años nos ha hecho mucha falta. Hay que poner un alto a esa situación y pronto, antes de acabar en un abismo sin fondo.

REPARTO TERRITORIAL

Durante los últimos años hemos visto nacer divisiones políticas casi caprichosas. Corregimientos y distritos con una población tan exigua y recursos tan limitados, que apenas podrían alcanzar el nivel de gestión administrativa de subsistencia. Es un reparto territorial con fines electoreros más que cumplir con el objetivo de desarrollo nacional. ¿Cómo puede constituirse en distrito un territorio que no llega ni a los 2,000 habitantes? ¿Cómo puede ser corregimiento una población con casi medio millar de personas? Hasta un plantel educativo de ciclo completo tiene más alumnos que toda la población de tales corregimientos y distritos. Definitivamente que habrá mucho que arreglar en nuestro país, porque cada día lo parten en pedacitos para que cada reyezuelo político tenga su pléyade de representantes de corregimiento y alcaldes con los que justificar la existencia de su circuito electoral y la cuota de poder que le garantice su músculo político para el matraqueo propio de nuestra política criolla.

¡MAYDAY, MAY DAY, MAYDAY!

Muchas son las interrogantes que empiezan a surgir en relación con la caída del helicóptero AN 141 del Servicio Aeronaval. Las explicaciones ambiguas de las autoridades y las especulaciones de algunos hacen pensar en un manejo oscuro de la situación. ¿Estaba la aeronave en alguna misión más allá de las rutinarias? ¿Será cierto que transportaba oro desde la mina conflictiva? ¿Por qué no ha sido más manifiesta la preocupación por el tercer tripulante desaparecido? Son interrogantes que han de responderse y pronto. Cuando hace más de 40 años cayó el FAP 205 por esos parajes con el general Torrijos abordo y otros pasajeros, la información oficial fluyó de manera abundante una vez se comprobó la caída del avión y el rescate de los cuerpos fue rápido y completo de acuerdo a las circunstancias. En contraste, lo que gira alrededor del AN 141 es más misterio que claridad. Un misterio tan denso como la bruma que cubre los montes donde ocurrió el siniestro.

Para otras noticias y temas ir a: https://aldiapanama.com

Comentarios anteriores de El Escorpión en: https://aldiapanama.com/category/opinion/el-escorpion/

aldiapanama