El Escorpión
Lunes 29 de julio de 2019
BUKELE PARA COLÓN
Al menos desde los últimos 30 años la situación de la ciudad de Colón parece detenida en el tiempo en cuanto a su progreso. Mas que mejorar, lo que se nota es el deterioro de sus edificios y del medio ambiente citadino, además de la pauperización de la población que aún queda en la ciudad. Quizá lo que necesitamos es un Plan Bukele para Colón, empezando por el encarcelamiento de todos los miembros de las pandillas que se han apoderado de las principales zonas pobladas del distrito, para así instaurar el clima de seguridad que necesita la urbe colonense para volver a vivir el progreso que desde hace mucho le dijo adiós.
CAJA DE PANDORA
El destape de los chanchullos cometidos con los fondos de la descentralización paralela prometen poner al rojo vivo el tema de las dádivas otorgadas a alcaldes y representantes de corregimiento favoritos del anterior gobierno. Lo que siempre negaron está próximo a salir a la luz y, por los vientos que soplan, no quedará títere con cabeza si el «pecadillo» es investigado a fondo por técnicos forenses de los estamentos competentes. Los que pensaban que la sinvergüenzura era eterna, estaban muy equivocados. Su única esperanza será que al asunto le echen tierra y deben estar rompiéndose el coco para idear de qué manera logran salirse con la suya.
CULTIVO DE CANNABIS
Uno de los puntos débiles del uso del cannabis medicinal es la licencia para sembrarla y para importarla pero, sobre todo, en manos de quién o quiénes estará el control de sembrarla o de importarla. Es un negocio que llenará los bolsillos de algunos, bajo el pretexto del uso medicinal de la matita hasta ahora proscrita. El control de esta actividad debe estar, de alguna manera, en manos del estado. Una de ellas podría ser que la universidad se encargará de sembrar las plantas y producir las tabletas o el jarabe de cannabis medicinal y utilizar los fondos que genere la venta para mejorar la educación superior a través de la investigación y la innovación. Al menos así tendrá un uso más noble la ganancia que genere la explotación del cannabis medicinal.
RESOCIALIZACIÓN VIAL
La alta incidencia de las infracciones de tránsito, sobre todos las graves, es un reflejo de la degradación moral en la que ha caído nuestra sociedad en el ámbito del respeto al orden público y los valores éticos. Lo mismo da pasarse un alto o una luz roja, invadir el carril contrario, hacer giro prohibido o, incluso, atropellar una persona. ¿Cómo enderezar lo que viene torcido desde hace rato? De nada ha servido el aumento de las multas, a no ser para que algunos corruptos lleven el producto de las coimas a sus bolsillos. Si parte del problema es la falta de educación vial, pues entonces debería existir un programa de resocialización de los conductores infractores y someterlos a asistir a talleres y trabajo comunitario relacionados con la educación vial, dependiendo de las faltas, además de las multas correspondientes.