Una de las vistas más impactantes de una ciudad para sus residentes y visitantes es el ambiente estético de sus vías y espacios públicos, además del aspecto que lucen sus casas y edificios. Si todo se ve en orden, limpio y bien cuidado esa ciudad será agradable y amigable para todo el que encuentre dentro de sus límites. Así alguna vez lucieron las ciudades de Panamá y Colón, aunque hoy en día no se pueda decir lo mismo de ciertas zonas céntricas de ellas. Los nuevos alcaldes han mostrado interés en revertir el estado deprimente y de desorden, incluso de abandono, que se ve en parte de nuestras principales ciudades próximas al Canal de Panamá. Fuera de lo que ellos puedan hacer con los espacios que son públicos, también será necesario exigir a los propietarios de inmuebles mantener en buen estado su propiedad, pintar sus casas y edificios y cortar la maleza que crece en sus terrenos. Conviene hacer, primero, una campaña de renovación estética durante un año al menos y, después de eso, empezar a aplicar la multa o sanción que corresponda. La ciudad es la casa de todos y, como tal, tenemos que cuidarla y mantenerla como un sitio agradable para propios y extraños.

1. ¿Por qué hemos descuidado el aspecto estético de nuestra ciudad?
2. ¿Tienen Panamá y Colón un aspecto agradable para atraer el turismo por sus calles?
3. ¿Cómo y quiénes deben involucrarse para crear en ellas un ambiente atractivo a la vista?