Jueves 13 de marzo de 2025

VUELO RASANTE

El anuncio de la compra de seis aviones para el Servicio Aeronaval ha provocado la ira popular en las redes sociales. De los distintos comentarios puede percibirse confusión y desconocimiento con respecto a la función de las aeronaves; incluso no ha faltado quien afirme que se están comprando aviones de guerra cazabombarderos. Quizá las reacciones tienen su fundamento en la falta de aclaración por parte de la presidencia del uso que se les dará en el combate del narcotráfico, en especial los Vulcano A29, y el propósito de los CASA 295 que pueden ser utilizados para transporte o para monitorear el movimiento de naves en el mar si están equipados con los sistemas de rastreo que son utilizados en otros lugares. Como están las cosas, las aeronaves ya vienen con su pecado original y será muy difícil borrar la impresión que el público ya se formado con respecto a su compra.

DEBATE RALENTIZADO

La devolución a segundo debate del proyecto de ley que reforma el régimen de seguridad social para afinar su entrada en vigencia es una muestra de que no todo ha sido pensado en conciencia cuando se introdujeron los cambios posteriores a lo aprobado por la comisión de salud. Con la diferencia de opiniones y criterios que han demostrado algunos diputados estos últimos días, la vuelta al tercer debate tiene pinta de que será encendido cuando sean votados los puntos más sensibles del proyecto de ley. Ají conguito para darle sazón.

CON LUZ PROPIA

Pero no para brillar, sino para producir su propia energía eléctrica construyendo una represa ilegal en Penonomé. Tras una denuncia las autoridades de Ambiente le cayeron encima, lo multaron y le van a destruir la represa que erigió sin permiso. Lo que no se ha explicado es si la persona tomó esa decisión por la falta de luz, los apagones prolongados o el monto de la tarifa eléctrica. Ahora saldrá multada y continuará su vida en penumbra por la noche y pasando calor de día.

COMO OLLA DE PRESIÓN

Así parecen estar las organizaciones que han prometido salir a la calle si se aprueba la reforma a la Caja de Seguro Social. Están en la tranquilidad del desesperado y la olla podría estar a punto de estallar y dejar pegados los porotos en el cielo raso. La carga por la tensión agravada por la desazón y el sentimiento de impotencia podría desatarse si se presenta la ocasión, con consecuencias impredecibles, por lo volátil que pueden resultar actitudes gremiales. Por eso no está demás prepararse para lo que pueda ocurrir si la cosa se pone fea.