Lunes 28 de abril de 2025

AGUA AL FUEGO

Los actos de corrupción descubiertos en la oficina del Cuerpo de Bomberos encargada de los permisos de seguridad en las construcciones le ha rebajado la categoría de benemérito, al menos por un rato. Aunque era un secreto a voces la comisión de estos actos, al fin parece que alguien se atrevió a ponerle el cascabel a ese gato. Al menos cinco unidades han sido dadas de baja por su presunta implicación en casos de corrupción emanados de la Dirección Nacional de Seguridad, Prevención e Investigación de Incendios (DINASEPI) de la institución y porque se presume que los destituidos cobraban coimas y sobornaban a proyectos de construcción a nivel nacional para la expedición de permisos de construcción, permisos de ocupación y otros trámites gestionados por la Dinasepi. Pero el asunto no acaba allí, porque hay otros procesos disciplinarios e investigaciones en curso relacionados con este tipo de corrupción que mantienen la zozobra entre algunos funcionarios bomberiles que a estas alturas deben estar buscando de qué manguera agarrarse para salvar el pellejo.

HUELGA SIN CLASES

Como medida de prevención para proteger a los estudiantes Yo Quiero a Lucy ha ordenado la suspensión de clases a nivel nacional. Tras unos días de iniciada la huelga docente en los que había docentes sin alumnos en unas escuelas y alumnos sin docentes en otras, el cierre de las escuelas se impuso este lunes. Ya sea por una por otra, las víctimas siguen siendo los estudiantes y el reto que tenemos por delante como sociedad es buscar nuevos métodos de enseñanza, apoyados en el uso de la tecnología y la inteligencia artificial, en los que el estudiante pueda avanzar en sus estudios a pesar de las huelgas y otras circunstancias que les impidan apersonarse a los centros escolares. A romperse el coco Lucinda.

INTENCIÓN OCULTA

Durante los últimos años hemos vivido el incremento de violentas protestas populares aupadas por grupos que profesan la ideología marxista, los que arrastran a otros aprovechando el descontento producido por la gestión corrupta de los políticos que llegan al poder y las coyunturas que se abren como consecuencia de sus actos de corrupción alimentando un movimiento que ha penetrado ciertos sectores de la sociedad cuya intención es crear una estructura de presión y agitación en la que basa su poder. Al paso del tiempo hemos llegado a un punto en el que debemos tomar decisiones como nación tendientes a ejecutar un plan nacional de desarrollo con énfasis en el emprendimiento, el empleo, la educación, la salud, el bienestar social y la inversión estratégica que arrebate el argumento que le da vida a una denominada izquierda que no quiere que le llamen por su verdadero nombre y abra posibilidades de progreso para todos los panameños en libertad y democracia. Vivimos un momento crucial para la preservación de nuestras libertades y el régimen democrático, aunque algunos aún no logren ver esta realidad. Hay que tomar decisiones urgentes, más allá de la preservación del orden público momentáneo, para diseñar y poner en práctica ese plan de desarrollo y mientras más tardemos en hacerlo más difícil nos será enderezar lo torcido.

FALTA UNA

Dice el Idaan que concluyó con éxito la cuarta de cinco operaciones programadas para la modernización de la planta potabilizadora de Chilibre. Como en las anteriores, la mayoría los habitantes del área metropolitana sufrió el corte del suministro de agua por 24 horas y algunos por más tiempo. Las obras de renovación tienen como objetivo optimizar el suministro de agua potable para los distritos de Panamá y San Miguelito en los que reside, al menos, una cuarta parte de la población nacional. Pero detrás de toda esta incomodidad de la suspensión del servicio necesario para la modernización de la planta, nos queda el amargo sabor de ver cómo la desidia y la irresponsabilidad de tantas administraciones de la institución y del gobierno hayan permitido que las instalaciones de la planta potabilizadora de Chilibre, la más importante del país, se convirtiera en un despropósito y en el monumento más patente a la incapacidad de los políticos que nos han tenido en sus manos la responsabilidad de gobernarnos durante tantos años.