Agua, combustible y electricidad
Por Avenabet Mercado / Línea Directa
Las problemáticas en los asuntos de la electricidad, agua, combustible y ahora las actividades del transporte son componentes económicos y sociales que ningún gobierno puede descuidar porque muchas veces estos elementos generan situaciones critica que, fácilmente, se tornan explosivas para el país.
Cualquiera de esos elementos debe tener pronta solución. Por ejemplo observemos el caso del distrito de Arraiján, en la provincia de Panamá Oeste, donde el agua escasea hasta por algunos días; pero también cuando llega cae de desde la pluma de gotas en gotas. En muchos hogares acumulan el líquido en tanques, vasijas u otros enseres.
Le toca ahora a los ministros, cada quien en sus áreas de operación y con su personal respectivo, dedicar un tiempo especial para observar el panorama donde estos problemas vienen generando preocupación social.
Esos escenarios, donde más que todos con los asuntos del agua, se debería tratar en forma más eficiente en el Consejo de Gabinete. Ya se ha podido controlar esos asuntos de la crisis con la pandemia del Coronavirus (Covid-19). No se puede seguir viviendo con esos asuntos donde el remedio siempre es acordar, acordar y acordar.
El asunto del problema del agua en Arraiján es para anotar en el libro Guinnes, jamás podemos comprender como en una región tan próxima al Canal de Panamá el vital líquido llega de chorrito a chorrito.
En este marco de penurias, no solamente ayudemos a la región de Arraiján; también en el duro camino sin agua pensemos en otras regiones del país, donde el anterior gobierno de la ineficiencia prometió letrinas para las familias rurales y jamás cumplió.
De manera pues, sería de desear que en el “Plan de Acción Colmena» que le fue presentado a la Ministra de Desarrollo Social (MIDES), María Inés Castillo, tras un amplio consenso entre la sociedad civil, la gobernación, gobiernos locales y la junta técnica, se incline una mirada hacia aquellos hogares sin aparato con sifón para evitar la subida del mal olor en las bajadas de aguas fecales.
No se pide hacer letrinas con agua caliente para las familias de áreas rurales, pero sí sería de desear que frente al gran desempeño social por detener la desocupación y la pobreza que viene desempeñando el presidente de la República, Laurentino Cortizo Cohen, llegue a esos lugares humildes con las manos de Dios.