El Escorpión

 El Escorpión

VUELVEN LOS CIERRES

Tal como algunas organizaciones anunciaron previamente, los bloqueos de vías y carreteras vuelven a la palestra. Con razón o sin ella, tales acciones terminan perjudicando más a un gran número de compatriotas que salen a la calle cada día a ganarse el pan con su esfuerzo y su trabajo. Y ese que labora y paga impuestos es quien sostiene a aquel que, por la realidad que le haya tocado vivir, no trabaja o no recibe ingresos suficientes. Es como empeñarse en matar la gallina de los huevos de oro. Que tenemos políticos ladrones y que no cumplen lo que prometen cuando llegan al gobierno, eso ya lo sabemos. Pero de allí a perjudicar al que es pueblo igual y su único pecado es ganarse el pan con el sudor de su frente, hay una diferencia abismal. Aunque duela, aquí la causa del problema no es que el indígena ngöbe sea pobre o que no se le deje llevarse las vigas de un incendio a algunos colonenses, sino que debe ponerse empeño en crear facilidades productivas para que todos puedan trabajar dignamente y satisfacer sus necesidades. Y eso comienza por ellos mismos, duélale a quien le duela.

LA ESTUFA TUVO LA CULPA

El informe de los bomberos sobre la explosión en el edificio Urbana, en el sector de Obarrio, fue producto de una fuga de gas en la cocina de uno de los apartamentos. Aunque el dictamen menciona una fuga en la tubería de suministro de gas del edificio, esta no guarda relación con la explosión, según los bomberos. En el mismo informe los bomberos recomiendan al ministerio público que se haga un peritaje de la estufa, para determinar si la fuga de gas fue por un daño de fabricación o por la manipulación que se hizo de la estufa. Pero los abogados de las víctimas y los afectados parecen no estar conformes con la opinión bomberil. ¿Cuán seguro es, entonces, el uso de una estufa en un edificio? Este asunto promete ponerse feo en el escenario del litigio. Mientras tanto, el que compre apartamentos que se desconecte del gas central y vuelva al tanquecito de gas (pero no el alcalde) o instale una estufa eléctrica, para no quedar como culpable de alguna posible explosión futura. Moraleja: la cuerda siempre revienta por lo más delgado.

CONCIERTOS EN LA LOCURA

La Dirección General de Ingresos (DGI) está tras la pista de algunos promotores que contrataron los servicios de algunos artistas españoles del 2011 al 2014. Resulta que algunos pagos eran tan irrisorios que al dividirse entre los miembros del grupo, apenas superaban el salario mínimo mensual panameño. Y ese fue el periodo de reinado del que sigue siendo el rey y de la existencia de la Autoridad Nacional de Ingresos Públicos de Cucalón y de Cobranzas del Istmo, un ente privado a quien se le concedió el cobro de impuestos y que resultó envuelta en un millonario caso de corrupción por peculado. Estaremos pendientes para ver quiénes eran los que bailaban al son que le tocaban los artistas españoles. ¡A cantar «jondo» señores!

DATOS DEL CENSO

Tras casi tres años de mora en el conteo de los habitantes del istmo, los datos preliminares del censo nacional comienzan a conocerse. Por ahora somos 3 millones 200 mil habitantes y contando. La experiencia del último censo no fue muy buena y resultamos ser un poco más de 4 millones y mal contados. Por los vientos que soplan, ahora se vislumbran algunos problemas en el «tin marín de dos pingüe» por la traición tecnológica en las áreas de difícil acceso, en donde no hay señal para usar los aparatos de trabajo. Allí no ha quedado más remedio que volver a la vieja usanza del lápiz y el papel, para cumplir con el conteo censal. ¿Seremos todos los que estamos y estaremos todos los que somos?

aldiapanama