El Escorpión
FIEBRE DE OBRAS
A pesar de las prohibiciones para publicitar las obras que realizan el gobierno central o los gobiernos locales, algunos se las ingenian para sacarle provecho electoral. Nada importa que no estén terminadas, el asunto es tratar de demostrar que algo están haciendo las autoridades involucradas. Tanta es la desesperación que no les importa hacer el ridículo ni exponerse al rechazo ciudadano con tal práctica. La verdad es que el poder no solo corrompe, sino que enloquece y embrutece. Palante es pallá. ¡Ji, ji, ji!
ESTE PUEBLO ES PERREDÉ
Con esta frase el partido que fundó Omar buscaba, hace muchos años, calar y demostrar su fuerza entre la población panameña. Hoy el colectivo apenas es una sombra de lo que fue otrora; al menos en la aceptación electoral un mes antes de las elecciones. Con un candidato que despierta más antipatía que simpatía y no inyecta el entusiasmo y la confianza política que reclama el partido. Solo hay que pensar en el ánimo con el que llegarán los ciudadanos a ejercer su voto, en medio de calles llenas de hueco, problemas de transporte y, probablemente, sin servicio de agua ni de electricidad. ¡Tremenda carta de presentación! Lo que se vislumbra el 5 de mayo es la derrota más grande del perredismo. Do you remember me?
CANDIDATO EN ASCUAS
Otro que está lidiando con la incertidumbre es el diminutivo de mulo, sobre quien pende el resultado del negocio judicial radicado en la Corte. Con una nominación trucha por la falta de vicepresidente y promesas electorales que esconden una fuerte carga de subsidios casi imposibles de cumplir, el hombre se aferra al resultado de unas encuestas que lo suben y lo bajan del primer lugar. Hasta le ha echado en cara a los docentes que el gobierno de su mentor le dio el aumento de salario más grande que recibieran jamás, después de menearles la rama y alborotarles el congo. Lo cierto es que apelar a una gloria cuestionable del gobierno de la locura no cala entre todos los votantes. En aquella ocasión recibieron el país con las finanzas públicas saneadas, una economía en crecimiento y el gran proyecto de la ampliación del Canal que puso mucho «chenchén» en la calle. Si con todo eso dejaron la economía cayendo desde el 2011, obras a medio palo, entre ellas la cadena de frío que nunca terminaron, y un alto endeudamiento, ¿qué les hace pensar que con unas finanzas públicas destrozadas, mayor deuda pública y economía desacelerada podrán gobernar gastando dinero a manos llenas? Las únicas grandes obras concluidas fueron las de Odebretch, porque los cariocas querían su billete. Yerere, dijo el ngöbe.
DRONES CULPABLES
Según el ministro pinoteo el uso de drones para introducir armas y drogas a La Joya es uno de los mayores dolores de cabeza que tienen en ese centro penitenciario. Hasta dijo que se han dedicado a decomisar drones y el asunto no para. Pero hay algunos puntos un poco turbios con todo esto. Si los drones los vuelan de noche, ¿no pueden rastrear los patios por la mañana? Si están los reclusos tomando el sol y llega el dron, ¿no pueden revisarlos antes de volver a las celdas? En los Países Bajos han entrenado halcones para capturar los drones que vuelan en las áreas prohibidas. Si aquí los vuelos de esos aparaticos son nocturnos, entonces que entrenen buhos o lechuzas, pero hagan algo por el amor de Dios.